¡Extra, Extra!

¡Extra, Extra!... ¡los diarios son botines de guerra!... ¡Extra, Extra!

Hace unos años, los dos diarios más importantes del país, Clarín y La Nación, se asociaban para impulsar emprendimientos periodísticos en conjunto. Formaban la empresa Cimeco, y en su nombre adquirían los diarios Los Andes y La voz del interior, los más renombrados de Mendoza y Córdoba. Los rumores dicen que el grupo Clarín aportó el dinero y La Nación el prestigio, ya que en aquellos tiempos Clarín era bastante repudiado en las provincias.

Lo cierto es que es sociedad se disolvió y el 80% del diario Los Andes pasó a manos del multimedio Clarín (el 20% restante pertenece a los herederos de la fallecida Elvira Calle de Antequera, la nieta del fundador del diario) Existen versiones que indican que la decisión de La Nación responde a despegarse de su socio a fin de no quedar salpicado por las maniobras desesperadas por mantener un poder monopólico que está a punto de terminar, y de esta manera poder mantener cierto respeto entre los lectores.

Este chimento económico tiene la importancia de obligarnos a reflexionar sobre la propiedad de los medios de comunicación y su calidad en la tierra en donde, a través de los recursos de la jueza Olga Pura de Arrabal, la ley de medios quedó trabada en la justicia.

El lector que se acerque hasta un puesto de diarios cualquiera en la provincia se encontrará ante una primera disyuntiva, esta es, optar por diarios de circulación nacional o por aquellos del ámbito local.

Si decide priorizar las noticias provinciales, el lector podrá optar por el diario Los Andes propiedad del Grupo Clarín, principal multimedio del país y muy criticado en la actualidad por lo sesgado de su información; o el diario Uno, propiedad del grupo comandado por Daniel Vila y José Luís Manzano que ostenta el segundo lugar de los multimedios más poderosos y de conocidos casos de superchería. Estos dos diarios son los de mayor tirada de la provincia y acaparan, enormemente, la venta da diarios. Existen otras opciones, es cierto, pero esas opciones son diarios chicos, de poco peso y no se ofrecen en todos los puestos de diarios. Para aquellos lectores avezados en internet, se les presenta una opción más, ya que no sólo podrá acceder a los ya mencionados en sus formatos digitales sino que además cuenta con la opción de “MDZonline” que solo está disponible en el éter tecnológico. MDZonline, de gran aceptación en la provincia, pertenece al grupo dirigido por Orlando Terranova, cuyo hijo fue candidato a concejal del PRO en ciudad, y que se lo vincula al grupo Vila-Manzano. Pero no sólo eso, Mauricio Macri enfrenta una causa que tiene por objeto determinar si la licitación para el otorgamiento de la explotación del mobiliario urbano de la Ciudad de Buenos Aires fue manipulada a favor de Editorial Sarmiento, la empresa mendocina perteneciente a la familia Terranova.

Supongamos que el lector tiene conocimiento de todo esto y decide optar por los diarios nacionales. En ese caso, luego de soportar la tediosa espera de su llegada, tendrá la posibilidad de elegir entre el diario Clarín; La Nación; diario Crítica de la Argentina, propiedad de Antonio Mata, el mismo empresario acusado de vaciamiento en Aerolíneas Argentinas; diario Perfil, fundado por Jorge Fontevecchia CEO de la editorial Perfil; o Página/12, el único medio que disiente con el discurso único de los otros diarios. Ah, Página/12 no se consigue en todos los puestos de diarios, es más, son muy pocos los que lo comercializan.

Este repaso sobre las opciones mediáticas con que cuenta la provincia no debería pasar por alto. Quien esto escribe sabe de la existencia de medios alternativos, pequeños diarios, grupos de trabajo, revistas under y otros, que no se asemejan a la propuesta de los grandes medios y que intentan crear un lugar de resistencia. El mayor problema que enfrentan es la división que existe entre ellos en un ámbito en donde la gente apegada a los medios tradicionales les da vuelta la cara.

Así estamos, atrapados por los multimedios y sin que la resistencia periodística pueda ayudarnos a salir. Mientras tanto, cientos de blogs y páginas en facebook intentan generar una nueva versión del periodismo, aunque muy atomizado y con poca repercusión.

Ya es hora de generar un cambio. No podemos esperar a que la ley de medios haga todo por nosotros. Debemos hacer un frente en común y generar desde las raíces mismas de la sociedad mendocina un sistema informativo que logre contrarrestar el discurso único de los grandes medios. Decirles no a esos diarios, imprimir uno nuevo que esté acorde a lo que realmente pasa en la provincia y divulgarlo. Este tiempo de dejar las pequeñas diferencias de lado y unirnos. De poner un objetivo primordial como este por sobre todo lo demás y dejarnos de discutir lo intrascendente. Ya es la hora.

Esteban Marcussi.

1 de junio de 2010